Expresidente socialista francés
François Hollande: “Sabíamos que en el flujo de refugiados había terroristas”
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Seis años después de los atentados islamistas del 13 de noviembre de 2015 en París, François Hollande, quien entonces era el presidente del país galo, ha proporcionado al tribunal que juzga los hechos su visión de lo ocurrido en un día trágico en el que 130 personas fueron asesinadas y cientos más resultaron heridas.
Aquella jornada, el exmandatario se encontraba en el Estadio Nacional asistiendo a un partido entre Francia e Inglaterra. Allí mismo, uno de los yihadistas se inmoló a las afueras del recinto, provocando el primero de los ataques que se produjeron en la capital francesa aquella noche.
Ahora, en su declaración ante los jueces a petición de una organización de víctimas, Hollande ha afirmado que el autodenominado Estado Islámico atacó a Francia por el modo de vida del país. "No por lo que hacíamos, sino por lo que representábamos (...) una sociedad abierta".
El expresidente ha testificado que los funcionarios franceses sabían meses antes de la noche de los atentados que el país podía ser objetivo de ataques terroristas por parte del autodenominado Estado Islámico. "Pero no sabíamos dónde, cuándo o cómo nos atacarían".
Hollande ha explicado que el Gobierno y las Fuerzas de Seguridad tenían conocimiento de que entre el flujo de centenares de miles de inmigrantes ilegales y refugiados que en aquellos momentos estaban entrando en Europa, “había terroristas”. En este sentido, el expresidente francés ha reconocido el "fracaso" de los servicios de inteligencia en la prevención de los atentados del 13 de noviembre de 2015, aunque, en su opinión, éstos continúan haciendo "todo lo posible para localizar y neutralizar a las personas que conforman una amenaza".
Los ataques de la noche del 13 de noviembre de 2015 acabaron con el brutal atentado a la sala de espectáculos Bataclan. Después de haber sido evacuado discretamente del Estadio "para evitar un movimiento de pánico", el expresidente llegó al Ministerio del Interior donde declaró el estado de emergencia. Hollande ordenó el asalto final a los tres atacantes restantes dentro del Bataclan, lugar que él mismo visitó esa misma noche. Durante el juicio narró su experiencia: "Vi gente que se iba del Bataclan, incluso entonces, abrazándose unos a otros. Me ven y no pueden decir ni una sola palabra". Y finaliza: "Eso permanecerá conmigo para siempre".
Seis años después de los atentados islamistas del 13 de noviembre de 2015 en París, François Hollande, quien entonces era el presidente del país galo, ha proporcionado al tribunal que juzga los hechos su visión de lo ocurrido en un día trágico en el que 130 personas fueron asesinadas y cientos más resultaron heridas.
Aquella jornada, el exmandatario se encontraba en el Estadio Nacional asistiendo a un partido entre Francia e Inglaterra. Allí mismo, uno de los yihadistas se inmoló a las afueras del recinto, provocando el primero de los ataques que se produjeron en la capital francesa aquella noche.
Ahora, en su declaración ante los jueces a petición de una organización de víctimas, Hollande ha afirmado que el autodenominado Estado Islámico atacó a Francia por el modo de vida del país. "No por lo que hacíamos, sino por lo que representábamos (...) una sociedad abierta".
El expresidente ha testificado que los funcionarios franceses sabían meses antes de la noche de los atentados que el país podía ser objetivo de ataques terroristas por parte del autodenominado Estado Islámico. "Pero no sabíamos dónde, cuándo o cómo nos atacarían".
Hollande ha explicado que el Gobierno y las Fuerzas de Seguridad tenían conocimiento de que entre el flujo de centenares de miles de inmigrantes ilegales y refugiados que en aquellos momentos estaban entrando en Europa, “había terroristas”. En este sentido, el expresidente francés ha reconocido el "fracaso" de los servicios de inteligencia en la prevención de los atentados del 13 de noviembre de 2015, aunque, en su opinión, éstos continúan haciendo "todo lo posible para localizar y neutralizar a las personas que conforman una amenaza".
Los ataques de la noche del 13 de noviembre de 2015 acabaron con el brutal atentado a la sala de espectáculos Bataclan. Después de haber sido evacuado discretamente del Estadio "para evitar un movimiento de pánico", el expresidente llegó al Ministerio del Interior donde declaró el estado de emergencia. Hollande ordenó el asalto final a los tres atacantes restantes dentro del Bataclan, lugar que él mismo visitó esa misma noche. Durante el juicio narró su experiencia: "Vi gente que se iba del Bataclan, incluso entonces, abrazándose unos a otros. Me ven y no pueden decir ni una sola palabra". Y finaliza: "Eso permanecerá conmigo para siempre".
