Trata de imponer nuevas restricciones
Las OMS vuelve a la carga: los índices de contaminación del aire que antes eran seguros, ahora son responsables de “millones de muertes”
La Organización Mundial de la Salud (OMS), que ocultó información vital en los momentos iniciales del surgimiento del Covid-19 para no perjudicar a China, que promoviendo los confinamientos generalizados ha sido un elemento clave en la rapidísima pauperización de Occidente y que alentando la cuestionable utilización de la técnica del PCR para analizar los casos positivos de coronavirus hizo estallar una “pandemia global” que todavía no ha terminado, vuelve a la carga con sus mensajes agonísticos y acientíficos.
Tal como ya venían anunciando las élites totalitarias globalistas, el próximo caballo de batalla va a ser la existencia de un “cambio climático” que, además, se refuerza con los “millones de muertes producidas” por la “polución atmosférica”. Por este motivo, la OMS ha anunciado nuevas directrices globales sobre la "calidad del aire" que endurecen los niveles recomendados de contaminantes, ya que los “expertos” de la Organización Mundial de la Salud han llegado ahora a la conclusión de que la contaminación del aire daña la salud humana en concentraciones aún más bajas de lo que se suponía hasta ahora.
Los seis contaminantes considerados por la OMS son las partículas en suspensión con diámetro igual o inferior a 10 micras (PM10), las partículas de menos de 2,5 micras (PM2,5), el ozono troposférico (O3), el dióxido de nitrógeno (NO2), el dióxido de azufre (SO2) y el monóxido de carbono (CO).
Las nuevas directrices rebajan el nivel recomendado de PM2.5 respecto a 2005 (de 10 a 5 microgramos por metro cúbico en la concentración anual y de 25 a 15 en 24 horas), PM10 (de 20 a 15 anual y de 50 a 45 en 24 horas) y NO2 (de 40 a 10 anual). Además, incluye nuevos valores de O3 (60 microgramos por metro cúbico en la en la temporada pico), NO2 (25 en 24 horas) y CO (4 en 24 horas).
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La Organización Mundial de la Salud (OMS), que ocultó información vital en los momentos iniciales del surgimiento del Covid-19 para no perjudicar a China, que promoviendo los confinamientos generalizados ha sido un elemento clave en la rapidísima pauperización de Occidente y que alentando la cuestionable utilización de la técnica del PCR para analizar los casos positivos de coronavirus hizo estallar una “pandemia global” que todavía no ha terminado, vuelve a la carga con sus mensajes agonísticos y acientíficos.
Tal como ya venían anunciando las élites totalitarias globalistas, el próximo caballo de batalla va a ser la existencia de un “cambio climático” que, además, se refuerza con los “millones de muertes producidas” por la “polución atmosférica”. Por este motivo, la OMS ha anunciado nuevas directrices globales sobre la "calidad del aire" que endurecen los niveles recomendados de contaminantes, ya que los “expertos” de la Organización Mundial de la Salud han llegado ahora a la conclusión de que la contaminación del aire daña la salud humana en concentraciones aún más bajas de lo que se suponía hasta ahora.
Los seis contaminantes considerados por la OMS son las partículas en suspensión con diámetro igual o inferior a 10 micras (PM10), las partículas de menos de 2,5 micras (PM2,5), el ozono troposférico (O3), el dióxido de nitrógeno (NO2), el dióxido de azufre (SO2) y el monóxido de carbono (CO).
Las nuevas directrices rebajan el nivel recomendado de PM2.5 respecto a 2005 (de 10 a 5 microgramos por metro cúbico en la concentración anual y de 25 a 15 en 24 horas), PM10 (de 20 a 15 anual y de 50 a 45 en 24 horas) y NO2 (de 40 a 10 anual). Además, incluye nuevos valores de O3 (60 microgramos por metro cúbico en la en la temporada pico), NO2 (25 en 24 horas) y CO (4 en 24 horas).
